La barrera fotoeléctrica, o cortina de infrarrojos, se utiliza para evitar que las puertas del ascensor se cierren en el momento que alguien o algo se encuentre entrando o saliendo de la cabina. La barrera fotoeléctrica cubre un área mayor y produce una barrera inmaterial. Es la mejor solución ante los cierres inesperados en cabinas mientras entra o sale una persona.
La cortina infrarrojos SFT-832 combina un diseño hermético con una buena apariencia externa, una fácil instalación y compatible con la gran mayoría de marcas de ascensores.
Esta barrera dispone de la función de tolerancia de fallos, aplicación muy fiable y con un estable rendimiento.
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Mediante el display SER 32 en la botonera de cabina, obtenemos la información necesaria para conocer el estado del ascensor.
Centralita oleodinámica diseñada para trabajar entre 55 y 210 l/min en alimentación trifásica.